Irán emitió una advertencia contundente esta semana, sugiriendo que podría buscar armas nucleares si percibe una “amenaza existencial” de Israel, intensificando las ansiedades en un Medio Oriente ya volátil. Los comentarios de Teherán se producen en respuesta a una serie de recientes ataques israelíes dirigidos a sitios militares cerca de la capital iraní, según funcionarios iraníes. Estos ataques, argumenta Israel, están destinados a disuadir la expansión militar de Teherán en la región, pero Irán los ha condenado como “actos de agresión”, lo que llevó al gobierno iraní a declarar que ahora está «listo para la guerra.»
La amenaza marca un cambio peligroso respecto a la postura anterior de Irán. Durante años, Irán ha mantenido que su programa nuclear es pacífico, pero las recientes escaladas con Israel parecen estar empujando a su liderazgo a reconsiderar esa posición, lo que genera nuevos temores de una carrera armamentista en la región. Los observadores señalan que Israel, ya en alta alerta debido al conflicto en curso entre Israel y Hamas, considera la influencia de Irán como una amenaza principal para su seguridad, especialmente dado el apoyo de Irán a grupos regionales que se oponen a Israel. En respuesta, Israel ha intensificado las operaciones destinadas a neutralizar las capacidades militares de Irán, acercando a ambos a una confrontación directa.
Los analistas temen que la participación de otras potencias importantes, como Rusia, que ha respaldado a Irán diplomática y militarmente, podría complicar aún más la situación. El posible cambio de Irán hacia la militarización nuclear no solo podría reconfigurar alianzas, sino también desestabilizar una región ya bajo una inmensa presión debido a los conflictos en curso.
Las fuentes de este artículo incluyen: AP, declaraciones de funcionarios iraníes e israelíes, y análisis de defensa internacional.