Los Green Bay Packers son como ningún otro equipo en la NFL. No solo son uno de los equipos más antiguos de la liga, sino que también son el único que es de propiedad de los aficionados. Formados en 1919 y uniéndose a la NFL en 1921, los Packers han acumulado múltiples campeonatos y un estatus legendario, desde los primeros días de Curly Lambeau hasta las icónicas victorias en el Super Bowl de Vince Lombardi. Juegan en Lambeau Field como parte de la NFC Norte y mantienen una larga tradición de victorias.
Lo que realmente distingue a los Packers es su modelo único de propiedad. A diferencia de otras franquicias de la NFL que son propiedad de multimillonarios o dinastías familiares, los Packers son propiedad de los aficionados. Sí, más de 538,000 accionistas poseen colectivamente más de 5.2 millones de acciones, aunque no obtienen ganancias ni reciben dividendos de ello. En cambio, cada aficionado que posee una acción tiene un pedazo del equipo en espíritu, si no financieramente. La valoración de $6.3 mil millones del equipo puede no estar disparándose como la de otras potencias de la NFL, pero la estructura sin fines de lucro y de propiedad de los aficionados de los Packers les da una autenticidad que pocos equipos pueden igualar.
El equipo utiliza fondos para mantener Lambeau Field, pagar los salarios de los jugadores y renovar las instalaciones a través de ofertas de acciones—realizadas en 1923, 1935, 1950, 1997, 2011 y, más recientemente, en 2021, para mantener la franquicia financieramente estable. Incluso han surgido rumores de que el mariscal de campo Jordan Love tomó un préstamo para adquirir el 51% de las acciones. Pero esa especulación no tiene sentido ya que el modelo único del equipo limita la propiedad a 200,000 acciones por persona, lo que hace que la supuesta mayoría de acciones de Love sea altamente improbable.
Las operaciones diarias son gestionadas por un comité ejecutivo de siete miembros y una junta de 43 miembros, asegurando que los aficionados mantengan una propiedad simbólica mientras líderes experimentados manejan el negocio. Mark Murphy, el actual Presidente y CEO del equipo, se retirará en 2025, y Ed Policy está preparado para asumir el cargo.
Como el mercado más pequeño de la NFL, Green Bay prospera gracias al inquebrantable apoyo de sus aficionados locales, haciendo que los Packers sean más que solo un equipo—son una comunidad. Este modelo colectivo, de propiedad de los aficionados, mantiene a los Packers arraigados y conectados, demostrando que un enfoque de propiedad no tradicional puede crear una de las franquicias más auténticas en todos los deportes.