El debut de Zach Edey en la NBA no salió como se esperaba. El imponente novato de los Memphis Grizzlies hizo un desafortunado ingreso en los libros de historia, estableciendo un récord que ningún jugador desea. Edey, la novena selección global de Purdue, cometió cinco faltas y fue expulsado tras jugar solo 15 minutos en el partido inaugural de la temporada de los Grizzlies contra los Utah Jazz. Según OptaSTATS, esto lo convirtió en el primer jugador desde la fusión de la NBA y la ABA en comenzar un debut en la NBA y ser expulsado en 15 minutos o menos—una hazaña que dejó a los aficionados y analistas hablando.
A pesar de esto, los Grizzlies lograron una emocionante victoria de 126-124 sobre Utah, pero la contribución de Edey fue mínima, anotando solo cinco puntos y capturando cinco rebotes. Si bien mostró promesas en la pretemporada, su debut destacó la empinada curva de aprendizaje que enfrenta. Posicionado como el centro titular de Memphis, la fe de los Grizzlies en Edey es innegable, pero su transición ha resultado ser difícil. Afectado por seis faltas, Edey luchó por mantenerse firme, sus errores derivando en gran medida de una mala posicionamiento—una trampa común para los novatos que a menudo mejora con la experiencia.
Edey no fue el único centro de los Grizzlies bajo escrutinio. Las lesiones de jugadores clave como Jaren Jackson Jr. han dejado a Memphis necesitando otras opciones en la posición de cinco. La versatilidad de Brandon Clarke parecía una opción segura, pero no cumplió con las expectativas, dejando a Jay Huff para que se destacara. Huff, contratado con un contrato de dos vías, aprovechó la oportunidad, anotando 13 puntos en 22 minutos, lanzando de manera eficiente desde el campo e incluso encestando tres triples, un impulso muy necesario para el equipo.
Edey, que apenas comienza su viaje, ahora enfrenta altas expectativas tanto de los aficionados de Memphis como del cuerpo técnico. A medida que se adapta al intenso ritmo y la fisicalidad de la NBA, Memphis espera una mejora más rápida del centro novato, especialmente mientras se esfuerzan por alcanzar la contienda por los playoffs. Su posicionamiento defensivo, el tiempo de reacción y su capacidad para adaptarse a oponentes más rápidos serán cruciales para su éxito a largo plazo.
Aunque ha grabado su nombre en una parte incómoda de la historia de la NBA, Edey tiene mucho espacio para reescribir su historia. Con orientación, y quizás con el eventual regreso de Jackson para reforzar la defensa, podría pronto cumplir con su promesa previa al draft. Por ahora, los Grizzlies y sus aficionados mantienen la esperanza de que su joven gigante encontrará su camino, ojalá a tiempo para tener un impacto significativo esta temporada.