Los Denver Nuggets sufrieron otro golpe devastador con una derrota de 145-118 ante los New York Knicks, marcando su segunda derrota en casa en solo cuatro días. El entrenador en jefe Michael Malone no contuvo su frustración durante la sesión de medios posterior al juego cuando se le preguntó si estaba listo para pasar página tras la vergonzosa derrota. Malone rechazó vehementemente la idea, enfatizando que no pueden simplemente «desechar» esta derrota. Criticó la falta de esfuerzo, fisicalidad y el rendimiento general del equipo, afirmando que una derrota tan humillante no debería ser fácilmente desestimada.
Malone reconoció el liderazgo vocal mostrado por Russell Westbrook, quien anotó 27 puntos, pero expresó la necesidad de que más jugadores, particularmente Nikola Jokic y Jamal Murray, quienes han sido los pilares del equipo durante años, asuman un rol de liderazgo dentro y fuera de la cancha.
A pesar de la ausencia de jugadores clave como Aaron Gordon, quien ha estado fuera por una lesión en la pantorrilla desde el 4 de noviembre, así como Jokic y Murray que también han perdido algunos juegos, Malone se negó a poner excusas por el pobre récord de 9-7 del equipo. Destacó la importancia de establecer un nivel de competitividad constante, independientemente de los jugadores disponibles.
Malone criticó la falta de dureza, fisicalidad y pasión del equipo, enfatizando que solo se estaban engañando a sí mismos si creían que podían ser un equipo de playoffs con tales actuaciones. Hizo un llamado a un esfuerzo colectivo de los jugadores y les instó a mostrar más determinación y cuidado en la cancha.
Jokic apoyó la evaluación de Malone y reconoció la necesidad de un llamado de atención, sugiriendo que el equipo necesitaba un buen golpe en la cara para salir de su estado actual. Afirmó que los jugadores, en conjunto, necesitaban hacer un mejor trabajo.
Murray coincidió con los sentimientos de Jokic y asumió la responsabilidad por el rendimiento del equipo, afirmando que era tarea de los jugadores, no de los entrenadores, encontrar soluciones. También especuló que la falta de enfoque del equipo podría haber sido influenciada por su decisión de quedarse en Los Ángeles durante la noche después de su victoria contra los Lakers el sábado.
Actualmente empatados con los Phoenix Suns por el séptimo mejor récord en la altamente competitiva Conferencia Oeste, los Nuggets se encuentran solo un juego por delante de los Minnesota Timberwolves, que ocupan el 11º lugar. El equipo debe abordar estos problemas de inmediato si quiere asegurar un lugar en los playoffs.