Perdedores de tres juegos consecutivos, incluyendo una derrota aplastante ante los Phoenix Suns, los Angeles Lakers están enfrentando no solo luchas en la cancha, sino también críticas del legendario de la NBA y analista de Inside the NBA, Charles Barkley. Barkley, conocido por sus comentarios directos, lanzó dardos al estrella de los Lakers, LeBron James, por su reciente pérdida en un parlay. A pesar de que los parlays de Barkley no han tenido éxito, los problemas de los Lakers van mucho más allá de sus problemas de apuestas. Esta caótica situación ha planteado preguntas sobre el rendimiento del equipo, los esfuerzos defensivos y la construcción general de la plantilla.
En sus recientes juegos contra los Nuggets y los Suns, los Lakers mostraron un preocupante patrón de colapsar en la segunda mitad. Las actuaciones mediocres del equipo después del medio tiempo han dejado a los aficionados preguntándose qué se dice en el vestuario durante el descanso. El esfuerzo defensivo y la concentración parecen ser los principales problemas que atormentan a los Lakers, ya que incluso los mejores defensores pueden ceder altos totales de puntos si les falta disciplina. Las luchas de los Lakers se destacan aún más por su incapacidad para igualar la producción de puntos de sus oponentes, con el equipo logrando anotar solo 15 y 18 puntos en el tercer cuarto en sus dos últimas derrotas.
Si bien LeBron James tuvo una actuación respetable contra los Suns, anotando 18 puntos y capturando diez rebotes, sus esfuerzos individuales no fueron suficientes para superar los lapsos defensivos del equipo. La crítica de Barkley a James proviene de su parlay fallido, pero subraya la necesidad de que James contribuya significativamente a la ofensiva del equipo si esperan superar sus deficiencias defensivas.
Las luchas defensivas de los Lakers no pueden atribuirse únicamente a la construcción de la plantilla. Aunque el regreso de Kevin Durant y Bradley Beal proporcionó un impulso ofensivo para los Suns, la falta de destreza defensiva de los Lakers ha sido un problema constante. El entrenador en jefe JJ Redick ha insinuado la necesidad de ajustes defensivos, ya que el equipo actualmente ocupa el puesto 27 en la NBA en rating defensivo. La dependencia de Anthony Davis como la principal fuerza ofensiva y defensiva del equipo ha resultado ineficaz. Los Lakers deben encontrar una solución a su falta de defensores perimetrales y reboteadores, mientras también consideran esquemas defensivos alternativos.
El rendimiento inconsistente de los Lakers y su incapacidad para encontrar cohesión como equipo se puede rastrear hasta el desafortunado intercambio por Russell Westbrook en 2022. A pesar de contar con dos de los mejores jugadores de la liga en James y Davis, los Lakers han luchado por encontrar el éxito. La frustración en torno al equipo sigue creciendo, ya que permanecen incapaces de capitalizar su poder estelar.
En conclusión, los Lakers están enfrentando actualmente una situación caótica tanto dentro como fuera de la cancha. La crítica de Charles Barkley a LeBron James añade presión adicional sobre el equipo. Las luchas defensivas de los Lakers, la falta de cohesión y los problemas en la construcción de la plantilla han contribuido a sus recientes derrotas y a su inconsistencia general. Queda por ver si el equipo puede abordar estos problemas y cambiar el rumbo de su temporada.