El exsecretario de Defensa del Reino Unido, Grant Shapps, ha hecho un llamamiento contundente a EE. UU. y a los aliados occidentales: defender Taiwán comienza con derrotar a Rusia en Ucrania. En un editorial sin restricciones para el Sunday Times, Shapps argumenta que una victoria rusa alentaría a China a invadir Taiwán, desencadenando un caos económico global. «Si permitimos que Putin tenga éxito en Ucrania, estamos enviando una señal a Pekín de que ellos también pueden someter una democracia por la fuerza», advirtió Shapps, insistiendo en que una respuesta robusta de Occidente en Europa es el claro disuasivo contra la agresión china.
Shapps señaló que el conflicto en Ucrania se ha convertido en un campo de pruebas, ofreciendo perspectivas sobre cómo podría responder el mundo a un asalto chino a Taiwán. Advirtió que permitir que Rusia domine Ucrania socavaría la credibilidad de Occidente, alentando a los regímenes autoritarios a nivel global. “Tenemos la oportunidad de enviar un mensaje claro a China de que tal agresión no será tolerada”, dijo, pidiendo un aumento inmediato en el apoyo militar a Kyiv.
El llamado de Shapps por más apoyo incluye presionar al Reino Unido para que levante las restricciones sobre sus misiles Storm Shadow, que actualmente limitan a Ucrania de usarlos en suelo ruso. Estos misiles de largo alcance, con un alcance de hasta 150 millas, podrían cambiar las reglas del juego si se les permite atacar sitios de lanzamiento dentro de Rusia. “Ahora es el momento no solo de proporcionar permiso de largo alcance para nuestros misiles, sino de hacerlo sin esperar una decisión de Washington”, argumentó Shapps, subrayando la urgencia de actuar de manera independiente y decisiva para cambiar el equilibrio.
Shapps enfatizó además que fortalecer las defensas de Ucrania ahora podría evitar una grave recesión económica, señalando el papel crítico de Taiwán en la economía global. Advirtió que una invasión china de Taiwán sumiría al mundo en una recesión—o peor. “Duplicar nuestro apoyo a Ucrania hoy no solo sería la acción correcta,” dijo, “sino que también haría que una invasión de Taiwán sea mucho menos probable, librándonos de una posible depresión global.”
Shapps concluyó instando a las naciones occidentales a aumentar la ayuda militar a Ucrania, argumentando que una postura firme en Europa envía el mensaje definitivo a los regímenes autoritarios. En su opinión, la victoria de Ucrania es esencial no solo para la estabilidad europea, sino también como una estrategia directa para proteger a Taiwán de las ambiciones chinas. “Apoyar a Ucrania significa mantener la paz a nivel global. Es hora de que Occidente respalde sus palabras con acciones,” declaró Shapps, sin dejar dudas sobre su postura respecto a la urgente necesidad de que EE. UU. y sus aliados actúen.