El CEO de McLaren, Zak Brown, criticó recientemente a Red Bull por el ambiente laboral negativo que actualmente tienen, refiriéndose a él como un «entorno tóxico». El equipo austriaco ha estado enfrentando dificultades y controversias desde la salida de Adrian Newey.
Brown discutió los problemas dentro de Red Bull tras la salida de Newey, afirmando que se ha convertido en un lugar poco saludable para trabajar. Él cree que la situación podría empeorar en el futuro.
Según Brown, muchos técnicos, ingenieros y otros miembros se unieron a Red Bull por Newey. Sin embargo, desde su salida, han estado circulando currículos de empleados de Red Bull que buscan dejar el equipo. Brown predice que la situación podría deteriorarse aún más.
Brown reconoce que es común que las personas dejen los equipos cuando el ambiente laboral se vuelve difícil. También cree que atraer patrocinadores en el futuro podría ser un desafío para Red Bull, ya que los patrocinadores potenciales serán cautelosos acerca de sus asociaciones.
Brown también destacó el drama que rodea al piloto estrella de Red Bull, Max Verstappen. Mencionó que los aficionados están especulando si Verstappen se quedará con el equipo o se irá al final de la temporada.
Aunque Verstappen tiene un contrato, aún no está claro si continuará con Red Bull. Brown mencionó que el padre de Verstappen, Jos Verstappen, ha sido muy crítico sobre la situación en Red Bull en el pasado.
A pesar de ser un equipo increíble, Brown cree que las tensiones dentro de la gestión de Red Bull podrían obstaculizar sus perspectivas a medida que otros equipos se acercan. El futuro del equipo de Max Verstappen en Milton Keynes sigue siendo incierto.