El dominio de Red Bull en la Fórmula 1 sufrió un duro golpe durante el Gran Premio de Italia en Monza, un fin de semana que el jefe del equipo, Christian Horner, calificó como un “punto bajo” para los campeones reinantes. Fue un contraste marcado para un equipo que parecía estar destinado a navegar hacia otro conjunto de títulos, ya que Max Verstappen acumuló siete victorias en las primeras 10 rondas. Pero con la competitividad de Red Bull evaporándose, el equipo ahora se encuentra en un territorio desconocido.
Verstappen, una vez intocable, ha enfrentado una frustrante racha de ocho carreras sin ganar, su peor desde 2020. Las dificultades del equipo han abierto la puerta para McLaren, que ahora lidera el Campeonato de Constructores, capitalizando la repentina caída de Red Bull. La sexta posición de Verstappen en Monza, donde luchó con un “monstruo” RB20 debido a problemas de equilibrio, marcó el punto más bajo de la temporada.
Sin embargo, Horner ve Monza como un punto de inflexión. El GP de Italia expuso fallas críticas en la estrategia de desarrollo del equipo, que él cree que ahora se están abordando. “Ya podíamos ver los problemas, pero creo que lo que Monza realmente expuso fue quizás alguna de las causas raíces, o ayudó a identificar la causa raíz del problema”, explicó Horner. “Así que estoy tomando Monza como el punto bajo y estamos empezando a construir a partir de eso.”
Desde Monza han surgido signos de recuperación, con Sergio Pérez mostrando potencial de podio y Verstappen logrando una sorprendente segunda posición en Singapur. Las mejoras son alentadoras, pero Horner reconoce que aún hay una brecha considerable que cerrar. En Singapur, Verstappen quedó a 22 segundos de Lando Norris de McLaren en las primeras etapas de la carrera. El equipo ahora está compitiendo contra el tiempo para llevar actualizaciones críticas al coche antes del Gran Premio de Austin.
“Cuando consideras dónde estábamos hace un par de semanas, creo que hemos hecho un progreso real,” dijo Horner. “Tenemos una vena de desarrollo y hemos entendido algunos de los problemas con el coche. Creo que estamos comenzando a abordarlos.”
El equipo de desarrollo de Red Bull en Milton Keynes se enfrenta a un horario agotador, con “muchas noches largas” planeadas mientras trabajan para cerrar la brecha. A pesar de que McLaren actualmente tiene el estatus de coche de referencia, Horner sigue siendo optimista. “Tenemos a las personas y la capacidad para hacerlo,” insistió.
Las apuestas son altas mientras Red Bull lucha por recuperar su dominio. Con seis carreras restantes y Verstappen aferrándose a una ventaja de 52 puntos sobre Norris, Horner es tajante en que el campeonato sigue en sus manos. “Vamos a luchar hasta el final del campeonato,” prometió. “Con muchas carreras y muchos puntos en juego, todavía queda mucha competición.”
Con las últimas dos triples jornadas a la vista, la campaña de Red Bull se encuentra en una encrucijada crítica. La promesa del equipo de “noches largas” muestra su determinación para cambiar las cosas, pero solo el tiempo dirá si pueden salvar la temporada o si el desastre de Monza fue el comienzo de su caída.