Lando Norris, piloto de McLaren, logró un impresionante segundo lugar en el Gran Premio de Fórmula 1 de Emilia Romagna. El jefe del equipo McLaren, Andrea Stella, elogió a Norris por su gestión adaptativa de la carrera, que casi resultó en una victoria. Norris se clasificó justo detrás de Max Verstappen, pero tuvo dificultades para mantener el ritmo del piloto de Red Bull en las primeras etapas, cayendo ocho segundos atrás. Sin embargo, Norris hizo una impresionante remontada en las etapas finales de la carrera, cerrando la brecha con Verstappen. Al final, Norris terminó a solo siete décimas de segundo detrás de Verstappen, afirmando que necesitaba algunas vueltas más para adelantarlo. Stella elogió a Norris por reconocer los problemas que afectaron su ritmo anterior y ajustar su enfoque en consecuencia.
Stella describió la carrera como interesante debido a la estrecha ventana de operación de los neumáticos. La combinación de habilidades del piloto, características de la pista y condiciones de los neumáticos creó diferentes dinámicas competitivas. En el primer stint, Verstappen parecía tener el control, y Norris tuvo que estar atento a los espejos retrovisores mientras enfrentaba la presión de Carlos Sainz. En el segundo stint, Norris gestionó sus neumáticos cuidadosamente desde el principio, sabiendo que sería un desafío terminar la carrera con los neumáticos duros. Stella señaló que aquellos que usaron neumáticos duros en el primer stint, como Sergio Pérez, no tuvieron un buen desempeño. Por lo tanto, la carrera se volvió táctica, y Norris hizo un excelente trabajo gestionando sus neumáticos, lo que le permitió tener un final fuerte.
Norris admitió que McLaren tuvo dificultades con la degradación de los neumáticos traseros debido a la configuración del coche para condiciones más frescas de lo esperado. Stella explicó que la temperatura de los neumáticos jugó un papel crucial en el rendimiento del coche y en la capacidad de Norris para perseguir a Verstappen. Si los neumáticos se sobrecalentaban, habría una caída significativa en el rendimiento. Stella creía que la alta temperatura de los neumáticos al inicio de la carrera hizo que McLaren perdiera terreno frente a Verstappen. Sin embargo, en la segunda parte de la carrera, Norris controló el ritmo mientras los neumáticos aún eran relativamente nuevos, asegurándose de que no se sobrecalentaran y manteniendo un rendimiento decente hasta el final.