La búsqueda del título de Fórmula 1 por parte de Lando Norris recibió un impulso significativo tras el Gran Premio de México, reduciendo la diferencia a 47 puntos detrás del líder Max Verstappen con solo cuatro carreras restantes. Reflexionando sobre la intensa batalla en pista que vio a Verstappen penalizado en dos ocasiones, Norris criticó al campeón reinante por sobrepasar los límites del juego limpio.
“Voy a cada carrera esperando una dura batalla con Max,” declaró Norris. “Está claro que su único trabajo es vencerme, y se sacrificará para hacerlo, como lo hizo hoy. Quiero esas duras batallas… pero justas. Hoy no fue una carrera justa y limpia, y recibió lo que se merecía.”
Al principio de esta temporada, Verstappen parecía destinado a asegurar su cuarto título sin mucho desafío. Sin embargo, la rápida mejora de McLaren ha convertido la carrera por el campeonato en un emocionante tira y afloja, con Verstappen ahora sin victorias en las últimas 10 carreras y la competencia con Norris intensificándose. El último enfrentamiento en México sigue a su choque en Texas, donde Norris recibió una penalización por salirse de la pista mientras intentaba adelantar, solo para que Verstappen enfrentara penalizaciones similares en México.
Cuando se le preguntó si las tácticas de Verstappen fueron más duras en México que en Austin, Norris respondió: “Probablemente, sí. Hoy sentí que solo tenía que evitar colisiones, y así no es como quieres correr.” Con Verstappen manteniendo una ventaja cómoda en el campeonato, Norris sugirió que su rival podría estar compitiendo con una mentalidad de “todo o nada”, sabiendo que tiene un colchón de puntos en el que apoyarse.
“Estoy haciendo mi trabajo y estoy feliz con mi fin de semana,” continuó Norris. “Pero no es mi trabajo controlarlo. Él sabe cómo conducir, y estoy seguro de que sabe que hoy probablemente estuvo un poco por encima del límite.”
A medida que la pelea por el título se acerca a las rondas finales, la rivalidad entre Norris y Verstappen solo está destinada a intensificarse. Con todo en juego, los aficionados pueden esperar fuegos artificiales mientras los dos contendientes se empujan al límite en la búsqueda del campeonato de 2024.