Un informe reciente arrojó luz sobre un miembro del personal que fue acusado de participar en un comportamiento inapropiado, empañando los recientes logros del equipo Red Bull Racing. Tras una exhibición exitosa en el Gran Premio de Japón, con Max Verstappen asegurando el primer lugar y Sergio Pérez obteniendo el segundo, el equipo tenía todas las razones para celebrar. Esta victoria marcó un cambio significativo para el equipo austriaco, después de un pobre desempeño en Australia. Sin embargo, en medio de las festividades, el director del equipo, Christian Horner, se vio obligado a responder preguntas sobre las acusaciones en su contra.
La alegría de la victoria se vio momentáneamente opacada cuando Horner fue cuestionado no sobre el excepcional rendimiento de su equipo, sino sobre una controversia destacada en un reciente informe de la BBC. Este informe se centró en un miembro del personal que había sido implicado en acusaciones de mala conducta, proyectando una sombra sobre el reciente éxito del equipo. Incluyó una cita de un amigo anónimo del miembro del personal, enfatizando el impacto que la situación tuvo en ella, describiendo su angustia emocional y sentimientos de aislamiento.
Confrontado con estas acusaciones, Horner respondió brevemente, simplemente diciendo «No» cuando se le preguntó sobre el asunto. La situación se volvió aún más confusa cuando se reveló que los detalles que rodeaban la salida de la mujer del equipo estaban envueltos en secreto debido a un acuerdo de confidencialidad. Esto dejó las circunstancias de su salida y el acuerdo en sí en un estado de ambigüedad.
Para complicar aún más la situación, el Daily Mail informó que Nicole Carling, quien había sido asistente personal de Horner durante 15 años, había regresado a Red Bull Racing en una capacidad temporal. Horner confirmó esto durante una entrevista después de la carrera en Japón, afirmando que su asistente de larga data ahora estaba en un rol de apoyo temporal.
A pesar de las crecientes acusaciones, Horner negó enérgicamente cualquier irregularidad. Red Bull llevó a cabo una investigación interna, realizada por un tercero independiente, que finalmente exoneró a Horner de las acusaciones. Red Bull GmbH emitió un comunicado, citado por Sky Sports, confirmando que la queja contra Horner había sido desestimada. El comunicado enfatizó la imparcialidad, exhaustividad y equidad de la investigación, al tiempo que destacó la confidencialidad del informe y el compromiso continuo de mantener los más altos estándares en el lugar de trabajo.