En una carrera donde el líder parece deslizarse sin esfuerzo bajo el radar, la dominancia suele ser la palabra del día. Charles Leclerc ofreció una actuación magistral, asegurando una victoria decisiva con un ritmo impresionante que solo su compañero de equipo, Carlos Sainz, pudo intentar igualar—aunque desde una distancia.
La dominancia de Leclerc se sustentó en una estrategia impecable de Ferrari, aprovechando su excepcional ritmo para mantenerse por delante de la competencia. A pesar de admitir que el fin de semana había sido desafiante, el piloto monegasco elogió los esfuerzos y la estrategia del equipo que finalmente aseguraron la victoria:
“No ha sido un fin de semana fácil. He tenido dificultades con la sensación del coche hasta ahora, pero estaba seguro de que las cosas mejorarían en la carrera, y así fue. Vimos señales de eso en la Sprint, y aunque no estábamos asustados, pensamos que otros mejorarían. Pero aún así teníamos la ventaja. Estoy realmente feliz con hoy. Un primer y segundo puesto para el equipo. No podríamos haber soñado con un mejor resultado.”
Leclerc continuó destacando el trabajo excepcional detrás de escena en Ferrari:
“Hicimos un trabajo increíble. El ritmo del coche fue fantástico, y eso es gracias a los ingenieros. Han estado trabajando como locos para traer las actualizaciones que introdujimos en Singapur y en las últimas carreras. Parece que está dando sus frutos. Todo el equipo está trabajando brillantemente. Las paradas en boxes fueron fluidas, y todo salió bien, así que estamos muy, muy felices. Seguimos luchando por el título, pero este es un gran comienzo para esta triple jornada.”
Con Ferrari luciendo fuerte y el rendimiento de Leclerc enviando un mensaje claro a la parrilla, la Scuderia continúa demostrando que es una fuerza a tener en cuenta mientras fija su mirada en el título de campeón.