Alpine tomó una decisión controvertida al contratar a Flavio Briatore, exjefe de los equipos de Fórmula 1 Benetton y Renault, como consultor ejecutivo. Briatore lideró anteriormente al equipo hacia dos campeonatos con Michael Schumacher durante la era de Benetton en la década de 1990. Más tarde, logró más éxito con Fernando Alonso cuando Renault asumió el control del equipo. Sin embargo, su gestión terminó en escándalo tras el infame incidente de manipulación de carreras en el Gran Premio de Singapur de 2008. A pesar de haber sido inicialmente prohibido en el automovilismo por la FIA, Briatore permaneció activo en el mundo de las carreras y recientemente había estado involucrado en asuntos comerciales con la F1. Su nombramiento por parte de Alpine marca su regreso a un papel destacado en la Fórmula 1 desde el escándalo, y es especialmente notable ya que es con el equipo que ahora se ha convertido en Renault. La noticia de la llegada de Briatore llega en un momento turbulento para Alpine, que ha experimentado cambios significativos en la gestión y ha enfrentado dificultades con un coche lento al inicio de la temporada 2024. Incluso han circulado rumores de que el equipo podría considerar renunciar a su estatus de equipo de fábrica para perseguir un acuerdo de motor de cliente.