Lewis Hamilton no se contuvo mientras se lanzaba a la cima de las hojas de tiempos en Monza, pero el siete veces campeón del mundo tenía más en mente que solo los tiempos por vuelta. El británico se mostró rápidamente aliviado después de que el joven prodigio de Mercedes, Kimi Antonelli, saliera ileso de un accidente masivo que podría haber tenido un desenlace trágico. «Estoy feliz de que Kimi esté bien, ya que fue un gran accidente. Lo principal es que él esté bien», dijo Hamilton, refiriéndose a la atmósfera tensa que envolvía el paddock tras el incidente.
Pero no fue solo el choque de Antonelli lo que generó rumores. La actuación de Hamilton en la pista de Monza recién asfaltada envió ondas de choque a través de la competencia. A pesar de un día caótico marcado por neumáticos desgastados y rivales en apuros, Hamilton dejó claro que Mercedes había descifrado el código. «El coche se ha sentido bien desde el principio», declaró, restando importancia a los desafíos presentados por el nuevo asfalto y los bordillos reconfigurados que hicieron que otros giraran en círculos.
Mercedes, nunca un equipo que se conforme con lo logrado, no estaba satisfecho con solo liderar las hojas de tiempos en FP1. Hamilton reveló que se realizaron cambios significativos antes de FP2, y dieron sus frutos. «Hicimos algunos cambios sólidos antes de FP2 y el coche dio un paso adelante en esa última hora», afirmó, insinuando que las Flechas de Plata apenas están comenzando. Con tanto el equipo como Hamilton enfocados en perfeccionar su ritmo a largo plazo, el mensaje para los rivales es claro: Mercedes viene por la victoria.
Sin embargo, Hamilton no estaba dispuesto a dejar que nadie pensara que el trabajo estaba hecho. «Todavía hay trabajo por hacer durante la noche tanto aquí como en la fábrica,» advirtió, subrayando la búsqueda implacable de la perfección que ha definido su carrera. Con el fin de semana del GP de Italia en pleno apogeo, todas las miradas están ahora puestas en Mercedes—y si el viernes es un indicativo, la competencia debería estar muy, muy preocupada.