Tim Cindric, el presidente de Team Penske, enfrentará una suspensión durante todo el mes de mayo. Esta decisión se produce tras la revelación de Team Penske de que varios miembros clave de su equipo de IndyCar han sido suspendidos debido a su participación en el recientemente descubierto truco de Push to Pass. Después de una extensa investigación interna, el equipo identificó fallas significativas en sus procesos y comunicaciones internas. Como consecuencia, cuatro miembros del equipo, incluyendo a Tim Cindric, Ron Ruzewski, Luke Mason y Robbie Atkinson, serán suspendidos durante las próximas dos carreras, a saber, el Sonsio Grand Prix y las 108ª 500 Millas de Indianápolis.
Tim Cindric, siendo el presidente de Team Penske, ocupa una posición destacada dentro del equipo y, por lo tanto, está sujeto a una suspensión más prominente. Junto a él, el director ejecutivo Ron Ruzewski, el ingeniero de carrera Luke Mason del equipo #2, y el ingeniero de datos senior Robbie Atkinson también enfrentarán suspensiones. La declaración del equipo no admite explícitamente ninguna violación intencionada de las reglas de IndyCar, pero tampoco busca justificar las acciones del equipo.
En el comunicado de prensa del equipo, Roger Penske expresó sus disculpas por el impacto negativo causado por las acciones de su equipo en la reputación de la serie. Reconoció la seriedad de la situación y las consecuencias duraderas que tiene para el deporte al que ha dedicado muchos años. Penske declaró: «Todos en Team Penske, nuestros aficionados y nuestros socios comerciales deben ser conscientes de que asumo plena responsabilidad por los errores cometidos y los lamento profundamente.»
IndyCar ya ha impuesto sanciones tras el descubrimiento del truco. Josef Newgarden fue descalificado de su victoria en St. Pete, mientras que Scott McLaughlin perdió su podio. Will Power también recibió una penalización de 10 puntos en el campeonato. Además, los tres equipos fueron multados con $25,000 y tuvieron que renunciar a cualquier premio monetario ganado durante la primera etapa de la temporada.
La suspensión de la gestión del Team Penske durante las Indy 500, que se considera el evento más prestigioso de IndyCar, representa uno de los castigos más severos, excepto por la terminación completa. El equipo aún no ha revelado cómo reestructurará sus operaciones durante el mes de mayo ni quién asumirá los puestos vacantes en las próximas dos etapas del campeonato.