Max Verstappen, el piloto de Red Bull Racing, enfrentó obstáculos en el Gran Premio de Fórmula 1 de Miami debido a daños sufridos durante la carrera. A pesar de comenzar en la pole position y liderar las primeras etapas de la carrera, Verstappen se quedó atrás de Lando Norris después de que el piloto de McLaren aprovechara un período de Safety Car. Verstappen luchó por mantenerse al día con Norris y terminó 7.6 segundos detrás, citando problemas de equilibrio que lo afectaron durante todo el fin de semana. El jefe del equipo Red Bull, Christian Horner, reveló que una parte significativa del suelo del coche de Verstappen estaba faltando, probablemente debido a que golpeó un cono en la chicana en la vuelta 22. Este daño afectó el rendimiento del coche y obstaculizó las posibilidades de victoria de Verstappen.
Horner reconoció que el equipo enfrentó problemas de equilibrio durante todo el fin de semana y que golpear el cono causó daños sustanciales en la parte inferior del coche. La sección faltante del suelo trasero izquierdo estaba visiblemente flexionando, comprometiendo aún más el rendimiento del coche. Sin embargo, Verstappen inicialmente restó importancia al impacto del daño, atribuyendo sus dificultades a problemas con el neumático duro. Mencionó que golpear el cono no afectó notablemente su ritmo. Verstappen incluso bromeó sobre el incidente, afirmando que decidió probar la durabilidad del alerón delantero al quitar el cono. Confirmó que no hubo daños y que no obstaculizó a otros pilotos en la pista.
No obstante, Horner aclaró que los comentarios de Verstappen se hicieron antes de inspeccionar el coche y que el daño sí afectó su rendimiento. Verstappen estaba perdiendo tiempo de manera constante en la curva 1 en comparación con Norris, lo que indica que el daño jugó un papel. Horner enfatizó que la sección faltante del suelo no formaba parte del diseño previsto del coche. Más tarde, Verstappen estuvo de acuerdo con la evaluación de Horner, reconociendo el daño en el suelo y el agujero que podría haber resultado de golpear el cono.
En conclusión, las posibilidades de Verstappen de ganar el Gran Premio de Miami se vieron comprometidas por el daño en el suelo sufrido al chocar con un cono en la pista. A pesar de liderar inicialmente, tuvo dificultades para mantenerse al día con Norris y se quedó atrás debido a problemas de equilibrio persistentes. La sección faltante del suelo afectó el rendimiento del coche, como confirmaron Horner y Verstappen.