Hamilton sorprendió al mundo de la Fórmula 1 con su anuncio de que se unirá a Ferrari en 2025, marcando el final de su década de 12 años y seis campeonatos de F1 con Mercedes. Nico Rosberg, ex compañero de equipo de Hamilton en Mercedes, expresó su sorpresa ante la noticia, pero entendió la razón detrás de la decisión del piloto británico. En una entrevista con Sky Sports F1, Rosberg declaró que, aunque el anuncio fue inesperado, tenía sentido considerando el prestigio tanto de Mercedes como de Ferrari como equipos legendarios. También señaló la afinidad de Hamilton por los coches de carretera de Ferrari, lo que convierte el cambio en una oportunidad para él de conducir para ambos equipos icónicos.
La decisión de Hamilton parece ser sabia, especialmente considerando las luchas actuales de Mercedes para producir un coche de F1 competitivo bajo las nuevas reglas de «efecto suelo». Rosberg destacó que el movimiento podría ser similar a la decisión de Hamilton de unirse a Mercedes hace 12 años, cuando no estaban rindiendo bien, pero posteriormente se convirtieron en ganadores de carreras. El momento del cambio de Hamilton a Ferrari podría una vez más resultar ventajoso para él.
Sin embargo, unirse a Ferrari significa que Hamilton tendrá que enfrentarse a uno de los pilotos más talentosos de la actual generación de F1, Charles Leclerc. Leclerc, un producto del programa de pilotos jóvenes de Ferrari, es muy apreciado por los aficionados y expertos. Cuando se le preguntó sobre la dinámica entre los dos pilotos, Rosberg mencionó que Leclerc no parece alguien que se involucraría en conflictos con su compañero de equipo, lo que podría hacer que la situación sea menos volátil. Sin embargo, reconoció las excepcionales habilidades de clasificación de Leclerc, clasificándolo como el segundo mejor, solo detrás de Max Verstappen. Rosberg predijo una dura batalla entre los dos pilotos y creía que sus niveles de rendimiento serían muy similares.
Si las predicciones de Rosberg se hacen realidad, Ferrari no tendrá que lidiar con la animosidad entre los pilotos que enfrentó Mercedes cuando Rosberg y Hamilton eran compañeros de equipo.