A pesar de que los cargos fueron retirados, la persona que acusó a Red Bull no aceptó el resultado y impugnó la decisión de la empresa, lo que resultó en una demanda en curso.
Red Bull negó las alegaciones hechas por un asociado cercano de la persona que acusa al Director del Equipo Christian Horner de comportamiento inapropiado en medio de la controversia en curso.
Horner, quien fue acusado de mala conducta por un empleado no identificado del equipo de Fórmula 1 de Red Bull, ha refutado consistentemente estas afirmaciones.
Una investigación independiente lo exoneró posteriormente de cualquier irregularidad, al no encontrar evidencia de mala conducta.
A pesar de que los cargos fueron retirados, la persona que los presentó no aceptó el resultado y impugnó la decisión de Red Bull, lo que resultó en una demanda en curso.
Una reciente entrevista en la BBC presentó comentarios de un amigo del acusador, destacando la progresión del caso hacia un tribunal laboral y expresando preocupaciones sobre los esfuerzos por mantener los procedimientos en confidencialidad.
El amigo proporcionó detalles sobre las dificultades enfrentadas por el acusador, incluyendo amenazas de acciones legales y suspensión laboral, que creen que en última instancia tienen como objetivo terminar su empleo.
En contraste, la declaración de Red Bull contradijo estas afirmaciones, aclarando que no hubo intentos de mantener el tribunal en secreto y negando cualquier intención de terminar el empleo del acusador.
La situación se intensificó cuando mensajes supuestamente enviados por Horner al empleado se hicieron públicos, atrayendo la atención de los medios, miembros del equipo de Red Bull y funcionarios de la FIA.
Horner se mantuvo firme en su negación de estas nuevas acusaciones también.
El equipo de Red Bull de Christian Horner aún enfrenta posibles consecuencias a medida que la FIA se involucra.
El amigo del acusador también proporcionó información sobre el impacto emocional que esta situación tuvo en ella.
A pesar de recibir ofertas para lucrar con su historia, la acusadora no mostró interés en hacerlo, adhiriéndose a las restricciones que limitan su comunicación solo a miembros de la familia inmediata.
Esta restricción resalta la tensión personal y profesional que está experimentando en medio de la batalla legal en curso y las relaciones públicas en torno a estas acusaciones.