Durante la carrera del domingo pasado, Maverick Viñales destacó por su mejora al volante de la Aprilia RS-GP, y fue incluso el mejor hombre del fabricante italiano en pista. ¿El secreto? Un mejor inicio y estar más en sintonía con la moto y sus requerimientos de conducción, sin olvidar que hay problemas por resolver.
Séptimo en la larga carrera de Spielberg, Viñales subrayó algunas de las dificultades que experimentó, sin olvidar que fue un fin de semana que terminó en una nota positiva: ‘En este momento, creo que, especialmente en este tipo de circuito y especialmente en esta pista donde frenar lo es todo, estamos teniendo algunas dificultades, especialmente para detener la moto y eso complica la carrera, pero realmente creo que es un buen resultado’.
El español explicó dónde necesita mejorar la moto, en declaraciones que coinciden con lo que también había dicho Aleix Espargaró: ‘Conseguimos algunos puntos. Estamos tratando de mejorar, la moto tiene algunas áreas donde es muy fuerte y sabemos que necesitamos mejorar en el departamento de frenos, especialmente’.
De sábado a domingo hubo una mejora, aparentemente, pero Viñales admitió que el equipo… ni siquiera tocó la moto:
– No la tocamos. Tuve un inicio más limpio, eso es seguro, y me encontré más “a la manera de Aprilia” y pude controlar los neumáticos mucho mejor. El neumático medio en la parte trasera hace que la moto funcione de manera diferente, empujas menos el delantero y eso nos costó un poco, pero controlé mucho a los pilotos, y eso me permitió ser más rápido en la segunda mitad de la carrera. Para ser honesto, la primera parte fue dura con el delantero, pero esperaba algo mucho peor.