Takaaki Nakagami concluirá su carrera a tiempo completo en MotoGP este fin de semana. El Gran Premio de Solidaridad de Barcelona será su última carrera antes de pasar a un rol de piloto de desarrollo con Honda, donde aún podría participar en eventos como comodín.
Su trayectoria comenzó en 2007 como comodín en el Gran Premio de Valencia en la categoría de 125cc, donde compitió durante las siguientes dos temporadas, aunque con resultados modestos. Después de perder su lugar en el Campeonato del Mundo, regresó a Japón en 2011, convirtiéndose en el campeón de J-GP2 en el Campeonato Japonés de Motociclismo en Ruta.
En 2012, Nakagami regresó a tiempo completo al paddock del Campeonato del Mundo, compitiendo en Moto2. Un año después, logró sus primeros podios, pero tuvo que esperar hasta 2016 para conseguir su primera victoria. Ese año, su mejor en el Campeonato del Mundo, ganó el Gran Premio de los Países Bajos y terminó sexto en la clasificación.
Después de otro año en Moto2, Nakagami fue promovido a MotoGP en 2018, siempre compitiendo con el mismo equipo: LCR Honda. Sin embargo, luchó por asegurar resultados sólidos: en siete temporadas, solo terminó entre los 15 mejores en tres ocasiones, siendo su mejor actuación un décimo lugar en 2020.
En ese año afectado por la pandemia, el piloto japonés incluso logró una pole position. También tuvo la mala fortuna, sin culpa de su parte, de presenciar el declive de la competitividad de Honda, lo que naturalmente obstaculizó sus resultados.
En su temporada de despedida, Nakagami ha tenido un rendimiento razonablemente bueno dadas sus circunstancias. Ha sumado 31 puntos, 20 menos que su compañero de equipo Johann Zarco, sin embargo, ha superado consistentemente a los pilotos del equipo de fábrica de Honda, Joan Mir y Luca Marini.
