Remy Gardner hizo su regreso a MotoGP este fin de semana, más de un año después de dejar la categoría y esta ausencia, asegura, le pasó factura. Además, el australiano destacó la diferencia en términos generales de velocidad e intensidad en la categoría, en comparación con lo que sucede en su clase actual.
Al resumir su carrera (domingo), el piloto que ocupó el lugar del lesionado Álex Rins comentó: ‘Largo. ¡Dios mío! Se nota cuando no estás compitiendo en un Gran Premio. Las Superbikes son aproximadamente diez minutos más cortas [en términos de tiempo de carrera]. Bueno, tal vez no tanto, pero se puede ver. Las últimas cuatro vueltas… maldita sea, podrías decir. Y aún más aquí. Hay 30 vueltas aquí y se convierte en mucho tiempo. Pero bueno, hasta la vuelta veinte, muy positivo’.
Mirando su rendimiento, en términos del ritmo que pudo establecer en la Yamaha M1, Gardner incluso admitió que pudo sorprenderse a sí mismo: ‘Creo que todo salió como quería. En términos de vueltas rápidas y eso, la verdad es que fui más rápido de lo que esperaba. Y en términos de ritmo normal, que no sé cómo gestionar esto, que no tengo experiencia, no tengo pruebas, no sé nada… Es normal que no sepa cómo gestionar esto’.
Sin embargo, al observar los tiempos del sábado al domingo, notó una diferencia: ‘Pero bueno, solo comparando con sábado y domingo, ya he mejorado como piloto y también hemos ajustado la moto y la configuración para mejorar. Hay un claro avance. Con más tiempo, podría ser algo diferente. La verdad es que me divertí mucho este fin de semana’.
