Un novato en constante crecimiento es una buena manera de definir parte de lo que Pedro Acosta ha estado haciendo este año en MotoGP, él que ya ha tenido algunas caídas pero este fin de semana en Sepang supo analizar la situación y hacer el juicio correcto para evitar una hipotética caída en la larga carrera.
La alta temperatura y el consiguiente aumento en la presión de los neumáticos fueron señales claras de que era necesario adoptar otra estrategia, y el #31 supo ser medido y no sobrepasar los límites en esa situación: ‘Sí, pero pude adelantar a Maverick [Viñales], [Álex] Rins y Fabio [Quartararo]. Con Álex detrás de mí, y el factor limitante era la temperatura delantera, que subió mucho, era extremadamente alta’.
Así, Acosta re-evaluó su posición en la pista, y admitió que estaba contento de tener la capacidad de adaptarse: ‘Por lo tanto, tenemos que estar felices porque supimos, quizás, cuándo parar’.
Y el momento para hacerlo fue ideal, cree: ‘También les digo que cuando decidimos parar, ya era así y no había más que dar, así que supimos recibir la advertencia y ajustar’.