Luca Marini decidió dejar VR46, donde montaba una Ducati, para unirse a Repsol Honda en MotoGP para 2024, aunque actualmente es uno de los fabricantes menos competitivos en el campo. De hecho, no todo comenzó según las expectativas iniciales, con tiempo de desarrollo ya perdido en la dirección equivocada.
Preguntado en el canal Zam Tube cómo evalúa este movimiento hacia el fabricante japonés, el italiano explicó que es demasiado pronto para hacer un juicio, aunque admite que el comienzo no fue como se esperaba:
– Aún no sé cómo definirlo, es demasiado pronto para decir. Creo que no ha pasado el tiempo suficiente; tomará años saber si la decisión fue correcta o no. Sabía muy bien en qué me estaba metiendo, pero lo que no esperaba era comenzar la temporada con una moto que estaba por debajo de la del año pasado.
Desde entonces, ha habido avances, aunque no reflejados en el rendimiento: ‘Hemos dado algunos pasos adelante. Ahora la moto se maneja bastante bien, pero estamos sorprendidos por el rendimiento, y eso es lo que estamos tratando de resolver lo más rápido posible. En mi opinión, podemos volver a luchar por la victoria’, dijo Marini.
El #10 también habló de un contratiempo entre las pruebas de Valencia en noviembre de 2023 y el inicio de la temporada: ‘Durante las pruebas de Valencia en 2023, sentí una buena base para empezar y luego intentar dar un paso adelante. Pero después de eso, todo dio un giro. Ahora, estamos volviendo al camino correcto, pero en mi opinión, perdimos seis meses. Poco a poco, estamos mejorando, pero es obvio que perdimos mucho tiempo de desarrollo en la dirección equivocada. Desafortunadamente, no puedo decir más porque quiero mantener algunas cosas para mí’.