Francesco Bagnaia confirmó su futuro en MotoGP temprano, firmando una renovación con Ducati hasta 2026 antes del primer Gran Premio de la temporada, a diferencia de muchos de sus rivales, que aún no tienen contrato para 2025.
Esta es una situación que deja al campeón de 2022 y 2023 en una posición en la que todo lo que tiene que preocuparle es alcanzar sus objetivos en la pista con un equipo con el que se siente muy cómodo, como dijo en la rueda de prensa:
– Estoy un poco celoso de que no tengo más opciones [ríe]. Está bien. Me siento súper bien con todo y no tengo que pedir más. La moto es la mejor, amo a mi equipo, estamos haciendo un trabajo increíble todos juntos, y toda la progresión que estamos haciendo es genial.
Así, Bagnaia señaló que, con la estabilidad que tiene, es posible centrarse solo en la competición: ‘Estoy muy feliz y seguro que esto me da más estabilidad – no tengo que pensar en nada más y puedo estar enfocado solo en el objetivo’.