El inicio del fin de semana del GP de Tailandia fue turbulento para Aleix Espargaró de Aprilia, quien sufrió una fuerte caída en FP1 que generó dudas sobre su participación. El piloto veterano tuvo una caída seria en la Curva 12 del Circuito Internacional de Chang, lo que obligó a un final anticipado de su sesión y un rápido viaje al centro médico para su evaluación.
Espargaró, quien mostró signos visibles de incomodidad, fue sometido a un examen inmediato por el equipo médico del Dr. Ángel Charte. Afortunadamente, los médicos descartaron cualquier lesión grave, diagnosticando solo un trauma menor. Sin embargo, después de regresar brevemente a la pista, Espargaró tuvo que interrumpir su sesión y finalmente terminó en el último lugar de la clasificación del día.
Tras la sesión, el Dr. Charte confirmó que no se recomendaba continuar practicando. Espargaró fue trasladado más tarde al Hospital de Buriram como medida de precaución, donde pruebas adicionales confirmaron nuevamente que no había fracturas ni lesiones graves. Aprilia emitió posteriormente un comunicado, confirmando que el piloto estaba “en condiciones” de competir en el Sprint del sábado.
Este fin de semana tiene un significado especial para Espargaró, quien se encuentra cerca del final de su carrera como piloto oficial de MotoGP. Con solo dos Grandes Premios restantes antes de pasar a un rol de pruebas con Honda, el experimentado piloto de Aprilia está ansioso por seguir compitiendo al más alto nivel a pesar del contratiempo.
La determinación de Espargaró y el visto bueno de su equipo médico significan que los fanáticos pueden esperar verlo de regreso en la pista, con la esperanza de una actuación sólida en lo que es una carrera penúltima significativa en su carrera.