Durante la carrera de ayer y después del incidente que involucró a cuatro pilotos, poco después del inicio del GP de Indonesia, durante un tiempo la bandera amarilla estuvo en el aire y muchos se preguntaron por qué no se levantó la bandera roja para despejar la pista, y Aleix Espargaró consideró que no es una zona particularmente fácil de limpiar.
El piloto de Aprilia, que fue uno de los involucrados en el incidente, provocado por Jack Miller y que dictó el final de la carrera para Álex Márquez y Luca Marini, comentó sobre la demora por parte de los comisarios, «excusándolos» dada la zona específica donde ocurrió el accidente.
‘El problema es que es un lugar muy complicado. No es una curva normal. Es muy fácil perderse en esa chicana. Hubo muchos accidentes, también en Esquenta con Alex Márquez. Y sí, vi que no podían retirar la moto, porque es normal. Había cuatro motos en la grava, así que no es fácil sacarlas’ dijo el #41 en una reunión después del GP.
Espargaró había lamentado previamente el final prematuro de la carrera en un fin de semana lleno de dificultades al afirmar que nunca logró ‘ser competitivo’, pero lo peor, esta ha sido una tendencia recurrente en los últimos GPs, con el español incluso admitiendo que el equipo está ‘en un momento difícil.’