Aleix Espargaró se despidió de MotoGP ayer como piloto a tiempo completo y no podría haber pedido un mejor fin de semana, admitió. Desde el lugar donde se celebró el GP, su competitividad e incluso el título de Jorge Martín, todo salió bien, consideró.
Enfrentándose a su último GP, el piloto de Aprilia – que ahora se convertirá en piloto de pruebas de Honda en la próxima fase de su carrera – no ocultó su felicidad por cómo transcurrieron las cosas: ‘Este domingo le doy un 10 de 10. Siento que soy una persona afortunada, realmente privilegiada y estoy muy agradecido por lo que hice este fin de semana, y era imposible soñar con un mejor fin de semana.’
El español de 35 años recordó luego los elementos que se combinaron para hacer de este un fin de semana inolvidable y de ensueño:
– Después de 20 temporadas despidiéndome (de la categoría) en «mi» circuito, en casa y con mi familia, muchas sorpresas de Aprilia y siendo súper competitivo, porque casi conseguí la pole, luché con la Ducati por el podio, Jorge [Martín] ganando el título, con el que le ayudé un poco, así que 10 de 10, y siento que realmente soy afortunado, un hombre con suerte.
