En un movimiento innovador, la colonización del espacio está a punto de revolucionar la generación de energía. A diferencia de la Tierra, donde dominan los métodos tradicionales, las colonias del futuro dependerán en gran medida de fuentes de energía verde. Si bien se utilizarán paneles solares, la energía nuclear jugará un papel vital en satisfacer las demandas energéticas de estos asentamientos extraterrestres.
Según la Asociación Mundial de Energía Nuclear, actualmente hay 440 reactores nucleares en funcionamiento en 32 países de todo el mundo. Estos reactores produjeron la asombrosa cifra de 2,545 TWh de energía en 2022, lo que representa aproximadamente el diez por ciento de las necesidades energéticas anuales del planeta. Sin embargo, en las colonias espaciales, se espera que la dependencia de la energía nuclear sea aún mayor.
Varias empresas, incluida Rolls-Royce, están desarrollando reactores nucleares pequeños pero potentes capaces de satisfacer los requisitos energéticos de los asentamientos espaciales. Una de estas soluciones es el Micro-Reactor, diseñado por la empresa aeroespacial británica. Este diseño innovador utiliza uranio y puede generar entre uno y diez megavatios de energía. Su tamaño compacto permite un fácil transporte por tierra, mar y aire, eliminando los desafíos logísticos.
Originalmente destinado para su uso en la Tierra, el Micro-Reactor ha atraído la atención por su posible papel en las actividades en la superficie lunar. Rolls-Royce recientemente aseguró 4.8 millones de libras (6.2 millones de dólares) en financiamiento de la Agencia Espacial del Reino Unido para desarrollar aún más esta tecnología. Combinado con subvenciones anteriores de 1.18 millones de libras (1.5 millones de dólares) y 2.9 millones de libras (3.7 millones de dólares), este apoyo financiero avanzará el nivel de preparación tecnológica general del Micro-Reactor.
Colaborando con investigadores de la Universidad de Oxford y la Universidad de Bangor, Rolls-Royce tiene como objetivo diseñar un sistema integral para el Micro-Reactor. Esta asociación acercará la tecnología a una integración completa en los sistemas espaciales. En un hito significativo, se planea un vuelo de prueba más allá de la atmósfera terrestre dentro de la próxima década. Esta misión no será hacia la Luna, sino más bien a la órbita de la Tierra, ya que el reactor también puede alimentar satélites y naves espaciales.
Abordando las preocupaciones sobre la seguridad del transporte de uranio al espacio, Rolls-Royce asegura al público que el diseño del Micro-Reactor incorpora múltiples capas de protección. Estas medidas garantizan la resiliencia del reactor incluso en las condiciones más extremas.
Con el avance de la tecnología de energía nuclear, la colonización espacial está lista para adoptar soluciones de energía verde. El Micro-Reactor, con su tamaño compacto y sus impresionantes capacidades de generación de energía, representa un paso significativo hacia adelante en el abastecimiento de asentamientos extraterrestres. A medida que nos aventuramos más allá de nuestro planeta, el futuro de la energía reside en las estrellas.