Porsche ha puesto oficialmente el freno en su rápida transición hacia los vehículos eléctricos (EVs), reconociendo que la adopción de los EVs no está acelerándose como se planeó. Con las ventas globales del Taycan, el sedán y la camioneta eléctrica insignia de Porsche, cayendo un asombroso 50% interanual hasta el tercer trimestre de 2024, el fabricante de automóviles está revisando su estrategia para asegurar que los vehículos de motor de combustión interna (ICE) sigan siendo parte de su portafolio.
La inversión en ICE está de vuelta: Cayenne, Panamera y más
Hablando con Automotive News Europe, el Director Financiero de Porsche Lutz Meschke confirmó el renovado compromiso de la compañía con los motores de gasolina. Se están canalizando inversiones significativas para desarrollar versiones ICE del Cayenne y Panamera, dos de los modelos más rentables e icónicos de Porsche.
“Nos quedaremos con el motor de combustión por mucho más tiempo,” declaró Meschke, añadiendo que algunos modelos inicialmente planeados como totalmente eléctricos pueden ahora incluir opciones híbridas o ICE. “Actualmente estamos en medio de tomar decisiones conceptuales.”
Esto señala un cambio monumental en el enfoque de Porsche, potencialmente extendiendo la vida útil de los motores V8 y los trenes motrices híbridos hasta la década de 2030. Sin embargo, el movimiento no está exento de desafíos, ya que muchos de los próximos modelos de Porsche están diseñados para utilizar plataformas EV dedicadas.
Los futuros EVs podrían tener versiones de gasolina
Meschke insinuó que modelos como el próximo «SUV K1», un vehículo eléctrico de tamaño completo con tres filas planeado para la segunda mitad de la década, podrían ser reimaginados para incluir un tren motriz de gasolina o híbrido. Este SUV de lujo está destinado a situarse por encima del Cayenne, y un giro para incluir opciones de ICE podría ampliar su atractivo en el mercado.
El 718: Una decisión crucial por delante
Los aficionados al 718 Boxster y Cayman probablemente estén prestando mucha atención. La generación actual de estos queridos coches deportivos está programada para ser reemplazada por modelos exclusivamente eléctricos a finales de 2025. Si bien el desarrollo de estos reemplazos EV está casi completo, los entusiastas mantienen la esperanza de que Porsche podría reconsiderar y mantener una versión de gasolina en la línea. Sin embargo, dado el mercado de nicho para coches deportivos, un 718 de gasolina podría no tener sentido financiero.
¿El futuro del Macan: una carta salvaje?
El Macan de la generación anterior, uno de los modelos más exitosos de Porsche, está programado para ser descontinuado en 2026, con su reemplazo ya lanzado como un crossover exclusivamente eléctrico. El Macan ha sido consistentemente uno de los más vendidos de Porsche, solo superado por el Cayenne en los últimos años. Algunos analistas de la industria especulan que Porsche podría encontrar una manera de reintroducir un motor de gasolina en la próxima generación del Macan o extender la vida de su predecesor de ICE a través de otro refresco.
911: Hibridación pero sin EVs—todavía
La joya de la corona de Porsche, el 911, se mantiene firmemente impulsado por ICE sin planes para una versión totalmente eléctrica en esta década. Sin embargo, el icónico coche deportivo se está moviendo lentamente hacia la electrificación, comenzando con el híbrido 911 GTS y el próximo 911 Turbo Hybrid, que se presentará en 2025.
¿Por qué el giro de regreso a la gasolina?
La recalibración de Porsche está impulsada por múltiples factores:
- Ventas de EV en declive: El rendimiento decepcionante del Taycan sugiere que la demanda del mercado para EVs de alta gama no es tan robusta como se anticipaba, incluso entre la base de clientes adinerados de Porsche.
- Preferencias del consumidor: Muchos compradores de Porsche siguen siendo leales a la experiencia visceral de conducir coches de gasolina, lo que hace que la transición a los EVs sea una venta más difícil.
- Rentabilidad: Los vehículos de combustión interna, particularmente los híbridos y los modelos de alto rendimiento, continúan siendo muy lucrativos para Porsche.
¿Qué sigue para Porsche?
La nueva dirección de la compañía refleja su intención de equilibrar la innovación con la demanda del consumidor, centrándose en la tecnología híbrida y extendiendo el ciclo de vida de sus ofertas de ICE. Este enfoque podría ayudar a Porsche a mantener su dominio en el mercado de coches de lujo y de alto rendimiento, al mismo tiempo que asegura una transición más suave hacia un futuro eléctrico.
Con el 911 permaneciendo como un ícono de gasolina, el Cayenne y Panamera recibiendo actualizaciones de ICE, y potenciales híbridos de futuros EVs, Porsche está apostando por una línea diversificada para navegar las complejidades de un paisaje automotriz en rápida evolución.