Mercedes-Benz reveló que registró una caída del 24.6% en los primeros tres meses de 2024, en comparación con el mismo período de 2023, alcanzando los €2974 millones, debido a la disminución en los ingresos y ventas de automóviles de pasajeros.
El fabricante de automóviles alemán anunció que la facturación, a su vez, cayó un 4% en el primer trimestre, alcanzando los €35,873 millones, en comparación con el mismo período del año anterior, en un entorno desafiante marcado por las restricciones en la cadena de suministro y una economía global incierta.
Las ganancias antes de intereses e impuestos (ebit) disminuyeron un 30% en el primer trimestre, alcanzando los €3863 millones, mientras que el costo de ventas aumentó un 2.5%, alcanzando los €28,767 millones.
Por área de negocio, Mercedes-Benz Cars, que incluye las ventas de automóviles de pasajeros, reportó una facturación de €25,713 millones hasta marzo, un descenso del 8% interanual, después de que las ventas cayeran en el mismo porcentaje a 462,978 unidades. Además, su ebit cayó un 41% a €2456 millones, mientras que la rentabilidad de las ventas disminuyó al 9%, frente al 14.9% del año anterior.
En cuanto a Mercedes-Benz Vans, los ingresos aumentaron un 6%, alcanzando los €4893 millones, mientras que su ebit creció un 22% a €933 millones, en un período en el que vendió 105,425 unidades, lo que representa un aumento del 7%.
El fabricante de automóviles alemán también confirmó sus pronósticos para 2024, un año en el que espera que los ingresos se mantengan en el mismo nivel que en 2023, aunque sigue atento a las perspectivas macroeconómicas y geopolíticas globales.