«¡Todo lo que escuché fue que Biden piensa que los seguidores de Trump son ‘basura’, y eso es simplemente inaceptable!» exclamó un asistente a la manifestación en Allentown, reflejando la indignación que recorre la base de votantes de Trump. El reciente desliz de Biden en una llamada de Zoom con Voto Latino ha encendido una tormenta de críticas después de que supuestamente se refiriera a los seguidores de Trump como “basura”—un comentario que ya está cambiando el panorama de las ajustadas elecciones de 2024. Los corredores de apuestas han reducido las probabilidades, con Trump acercándose ahora a la Casa Blanca mientras los comentarios de Biden resuenan en las encuestas.
Todo comenzó cuando Biden apuntó al comediante Tony Hinchcliffe, quien, en un reciente mitin de Trump, se refirió a Puerto Rico como una “isla flotante de basura.” Respondiendo a los comentarios ofensivos de Hinchcliffe, Biden dijo: “La única basura que veo flotando allá afuera son sus seguidores…su demonización de los latinos es inconcebible.” La reacción fue inmediata. Los seguidores de Trump e incluso algunos votantes indecisos vieron esto como un ataque directo a los millones que apoyan la candidatura de Trump para regresar al cargo. El senador Marco Rubio, aprovechando el momento en un mitin de Trump en Pennsylvania, encendió a la multitud al afirmar: «Hace un momento, Joe Biden declaró que nuestros seguidores son basura,» provocando una ola de abucheos y gritos que incendiaron las redes sociales.
Mientras la Casa Blanca ha insistido en que las palabras de Biden fueron sacadas de contexto, el impacto en la campaña de Trump es innegable. El equipo del presidente rápidamente se apresuró a aclarar, argumentando que los comentarios de Biden estaban dirigidos únicamente a la “retórica odiosa” del mitin de Trump, no a sus seguidores en su totalidad. Pero para muchos, el daño ya estaba hecho. Influencers republicanos y canales de medios alineados con Trump se apoderaron de la narrativa, amplificando la sensación de insulto y alienación entre los seguidores de Trump. Esta crisis de relaciones públicas no podría haber llegado en un peor momento para Biden, ya que los números de las encuestas son muy ajustados con la elección a solo días de distancia.
Mientras tanto, las casas de apuestas están cambiando sus probabilidades. Tanto Bet365 como Paddy Power ahora tienen a Trump como el favorito, mientras que Ladbrokes y Betfair muestran tendencias similares. En solo 24 horas, las probabilidades de Trump han aumentado del 66.7 por ciento a más del 69 por ciento—una señal clara de que el sentimiento público puede estar cambiando a su favor. La previsión actualizada de FiveThirtyEight coloca a Trump con un 52 por ciento de probabilidad de ganar, un aumento desde la casi paridad del martes, reflejando cuán rápidamente este tipo de controversias pueden inclinar la balanza electoral.
Este desliz subraya la feroz tensión en esta elección, con Biden compitiendo no solo contra Trump, sino también contra la base ardiente y dedicada que lo respalda. A medida que los números de votación anticipada aumentan, ambos campamentos están enfocados en mantener sus narrativas afiladas y a sus seguidores comprometidos. Biden ha intentado cerrar la brecha en un país más polarizado que nunca, pero su comentario—sin importar cuán involuntario haya sido—le ha traído una controversia no deseada. A medida que la elección se acerca, es probable que la campaña de Biden continúe con el control de daños, mientras el campamento de Trump capitaliza cada palabra.
Las fuentes de este artículo incluyen: Newsweek, declaraciones oficiales de la Casa Blanca y datos de encuestas recientes.