Uno de los desafíos de Marc Márquez al unirse a Gresini en MotoGP fue despojarse del instinto de conducción que adquirió tras una década con Honda. Ahora, pilota una Ducati, y desde el principio, reconoció que necesitaría adaptarse.
El campeón del mundo en ocho ocasiones aseguró que está dejando de lado gradualmente sus instintos de conducción: ‘Paso a paso, ese instinto se va. Por supuesto, cada uno tiene su estilo de conducción, pero ahora, paso a paso, ya llego a una pista y conduzco como una Ducati’.
Márquez luego explicó que la primera sesión de prácticas libres es la más desafiante debido a los hábitos de conducción de Honda, pero le ayuda a entender qué necesita adaptar y cambiar para ser más rápido:
– Es cierto que la FP1 siempre es la más difícil, porque tienes los recuerdos de muchos años, conduciendo de una manera y teniendo una línea. Pero luego, tan pronto como entiendes que sigues esa línea y eres lento, entonces necesitas cambiar, necesitas adaptarte. Esto es lo que hice, y además el equipo me ayuda con la moto, esto fue una gran mejora.