Donald Trump atrajo una atención significativa durante el Gran Premio de Miami por varias razones.
Antes de que el brillo de otro individuo robara la escena y trajera alegría a los aficionados, McLaren enfrentó críticas severas antes de la carrera en Miami. El equipo Papaya se encontró en el centro de la controversia al ser visto con un candidato presidencial de EE. UU.
Después de la carrera, surgieron informes indicando que el hombre de 77 años había visitado el garaje de McLaren tras recibir una invitación del equipo. Esta invitación provocó enojo hacia McLaren y Zak Brown, ya que la presencia de Donald Trump generó opiniones divergentes debido a su estatus político.
Una aficionada de McLaren, que se identifica como queer, expresó su decepción con Zak Brown en su cuenta de redes sociales. Manifestó su insatisfacción con la decisión del CEO de dar la bienvenida a Trump en el garaje, citando el historial del político de hacer declaraciones despectivas sobre las personas queer.
La situación se volvió bastante confusa, con otros aficionados uniéndose a la conversación y expresando su desaprobación por invitar al hombre de 77 años al garaje de McLaren. Además, muchos aficionados señalaron que el propio Zak Brown había declarado anteriormente que la política debería mantenerse separada de la Fórmula 1.
Durante el Gran Premio de Miami, Lando Norris logró una notable primera victoria. El piloto mostró una velocidad excepcional en la pista, trayendo un inmenso orgullo tanto a los aficionados papaya como a su equipo. Esta victoria marcó el primer triunfo de McLaren desde la carrera de 2021 en Monza.
En el pasado, Zak Brown hizo una apuesta con otro piloto durante su tiempo en McLaren. La apuesta giraba en torno a que el piloto australiano ganara una carrera y Brown se hiciera un tatuaje como resultado. Después de la impresionante victoria de Ricciardo en Monza en 2021, Brown cumplió con la apuesta. Cuando se le preguntó si tenía una apuesta similar con Lando Norris, Brown bromeó diciendo que no le importaría hacerse otro tatuaje, especialmente porque está orgulloso de su equipo y del joven piloto británico. Agregó un comentario sarcástico, mencionando que el diseño de la pista de Miami haría que el tatuaje fuera más doloroso debido a sus curvas en comparación con Monza.