Lotus Cars enfrenta desafíos financieros a pesar de un aumento en las ventas, reportando una pérdida neta de $202 millones en el segundo trimestre de 2024. Con las ventas de vehículos eléctricos (EV) que no se traducen en ganancias, la compañía está tomando medidas drásticas, anunciando hasta 200 despidos en el Reino Unido, tras una reducción similar de personal en julio de 2023. Lotus busca optimizar sus operaciones, explicando que los recortes “asegurarán la estructura organizativa adecuada para operaciones sostenibles.”
Lotus inicialmente pronosticó 26,000 unidades para este año, pero redujo su objetivo en más del 50% a 12,000 unidades debido a un reajuste del mercado. Las ventas aumentaron un 134% en los primeros nueve meses de 2024, impulsadas por el interés en sus modelos eléctricos, el SUV Eletre y el sedán Emeya, junto con el retrasado Emira, que finalmente se ha lanzado en EE. UU.
Sin embargo, el interés en los EVs premium está disminuyendo, con los compradores mostrando un renovado interés en los motores de combustión, lo que representa un obstáculo para Lotus mientras mira hacia un futuro eléctrico. Su próximo Type 135, un coche deportivo eléctrico inspirado en el hypercar Theory 1 Concept, está programado para lanzarse en 2026. A pesar del aumento en las ventas, Lotus se está recalibrando para enfrentar un panorama de mercado desafiante, con un camino incierto hacia la rentabilidad.