Lewis Hamilton estaba complacido de presenciar la victoria de George Russell en el Gran Premio de Austria. La inesperada victoria de Russell llegó tras un incidente que involucró a los líderes de la carrera. Hamilton, quien terminó en cuarto lugar, aplaudió a su compañero de equipo y mostró su apoyo mientras estaba en el coche.
Después de la carrera, Hamilton expresó su satisfacción por la victoria de su compañero. Felicitó a George Russell y agradeció al equipo en las fábricas de Mercedes en Brackley y Brixworth por su arduo trabajo en mejorar el rendimiento del coche. Hamilton creía que su dedicación había dado sus frutos y los había acercado a ser los mejores. Consideró el resultado en Austria como una recompensa bien merecida por los esfuerzos del equipo.
Reflexionando sobre su propio rendimiento, Hamilton reconoció que no había sido el fin de semana más fluido para él. Mencionó que su coche sufrió daños al principio de la carrera, lo que afectó su rendimiento general. A pesar del contratiempo, Hamilton se mantuvo decidido y optimista. Vio los desafíos como una oportunidad para aprender y crecer, con el objetivo de regresar más fuerte en la próxima carrera.
Después de una intensa batalla en la vuelta 19, Hamilton reveló que su coche estaba dañado durante una colisión con otro piloto. Esto resultó en un gran agujero en el costado de su coche, lo que dificultó su control. Como resultado, Hamilton se salió de la pista en la curva 1.
A pesar del contratiempo, Hamilton miró hacia adelante con optimismo a la próxima carrera en Silverstone. Destacó la atmósfera especial y el apoyo de los aficionados en el circuito, y creía que las características de la pista podrían adaptarse mejor a su coche. Hamilton eligió dejar atrás los incidentes en Austria y enfocarse en lo que podrían lograr en las próximas carreras.
A pesar de enfrentar desafíos, Lewis Hamilton reconoció que la victoria de su compañero de equipo y los puntos obtenidos fueron cruciales para reducir la brecha en el campeonato de constructores. Los aficionados estaban encantados con la sorprendente victoria de George Russell y esperaban una actuación similar en la carrera en casa de Mercedes en Silverstone.