El US Open está listo para reintroducir la tecnología de Revisión de Video (VR) con el fin de ayudar a los oficiales de tenis a resolver las decisiones disputadas hechas por los jugadores en el torneo de este año.
En 2023, el US Open se convirtió en el primer evento de Grand Slam en implementar la tecnología de Revisión de Video, con el objetivo de proporcionar evidencia para mantener o anular una decisión original.
Durante su fase de prueba inicial, la Asociación de Tenis de los Estados Unidos (USTA) confirmó que cinco canchas tendrían acceso a la tecnología VR. Sin embargo, hubo problemas técnicos durante su primer uso cuando se esperaba que hiciera un fallo definitivo sobre un doble rebote.
El campeón de Grand Slam en tres ocasiones, Andy Murray, quien estuvo involucrado en el partido donde ocurrió la decisión controvertida, instó a los organizadores a «solucionarlo». Parece que los organizadores han abordado las preocupaciones para mejorar el sistema para la edición de 2024 del torneo.
Según una fuente confiable, la tecnología VR se utilizará para todos los partidos del cuadro principal en el US Open 2024 en las tres canchas más grandes: Arthur Ashe, Louis Armstrong y Grandstand. Además, el Estadio 17 y las Canchas 5, 7, 11 y 12 también tendrán acceso a la tecnología.
El sistema de Revisión de Video es típicamente operado por un oficial y operador de VR fuera de la cancha, quienes transmiten las imágenes de video de una decisión disputada al árbitro de silla que supervisa el partido en su tableta.
Los árbitros de silla revisarán la evidencia presentada en sus pequeñas pantallas y determinarán si mantienen o anulan una decisión. Si no hay suficiente evidencia en las imágenes para cambiar la decisión, la decisión original se mantendrá.
Se permite a los jugadores un máximo de tres revisiones de video por set (una revisión adicional en cada desempate). Sin embargo, ¿qué decisiones estarán sujetas a la tecnología VR para ayudar a los árbitros de silla a tomar decisiones precisas?
La tecnología VR se utilizará para revisar los tiros que se consideren faltas, dobles rebotes, instancias de toque, interferencia o una pelota que golpea un objeto permanente en la cancha (cualquier cosa que no forme parte de la superficie de juego). Es importante señalar que este sistema no debe confundirse con la tecnología Hawk-Eye, que es automatizada y determina si una pelota ha tocado la línea o no.
De hecho, la tecnología VR está diseñada para complementar el sistema de llamadas de línea electrónicas en caso de fallos. Además, también se utilizará para rectificar errores de puntuación.
Como muchos sistemas, la tecnología VR tiene sus limitaciones y no puede usarse para arbitrar un partido completo. No se puede utilizar para abordar violaciones de tiempo, faltas de pie o llamadas de línea realizadas por el sistema Hawk-Eye (a menos que no esté funcionando).
Además, la tecnología VR solo puede intervenir en una violación de código si resultaría en una descalificación; el árbitro y el supervisor tienen la discreción de revisar las imágenes en tales casos.
Esto será un alivio bienvenido para los jugadores, ya que ciertas decisiones en los partidos de tenis pueden tener un impacto significativo en el resultado. Coco Gauff, una jugadora prominente en la Asociación Femenina de Tenis (WTA), ha expresado anteriormente la necesidad de que el deporte adopte completamente los avances tecnológicos.