Las esperanzas de Sam Mayer de terminar en una buena posición en la carrera de la NASCAR Xfinity Series en Atlanta se vieron literalmente envueltas en llamas después de un accidente catastrófico que dejó su auto consumido por el fuego. El piloto de 21 años se encontró en una situación aterradora tras chocar con Taylor Gray y estrellarse contra la pared, con solo tres vueltas restantes en la Etapa 2. El accidente, causado por un error del spotter, resultó en una bola de fuego que consumió la parte trasera del auto de Mayer, obligando al joven piloto a escapar rápidamente por su ventana.
La escena impactante se desarrolló cuando Mayer, siguiendo las instrucciones de su spotter, Kevin Hamlin, creyó que estaba libre de Gray. Pero el error de juicio de Hamlin llevó a Mayer a moverse de nuevo por la pista, golpeando el auto de Gray y enviando a Mayer contra la pared en la Curva 1. La colisión encendió un enorme fuego, obligando a Mayer a detenerse y saltar del auto, escapando de las llamas justo a tiempo.
Hamlin asumió toda la responsabilidad por el incidente, admitiendo el error crítico que terminó con la carrera de Mayer de manera dramática. Los aficionados no se contuvieron, expresando su indignación en las redes sociales. «Vaya, el spotter de Sam Mayer lo arruinó,» exclamó un aficionado en X, mientras otros pedían que Hamlin fuera reemplazado, diciendo: «Creo que Hamlin necesita encontrar un nuevo trabajo—esa es una decisión insana.»
Mayer, quien había estado confiado en su auto antes de la carrera, ahora enfrenta una serie de finales decepcionantes. A pesar del accidente espectacular, se mantuvo tranquilo, explicando la intensidad de las carreras en las etapas finales: «Siempre estás tratando de llevarlo al límite, especialmente con unos 10 para terminar en la etapa,» dijo Mayer a Fox Sports.
Desafortunadamente, el choque hizo que Mayer terminara en el 26º lugar, continuando una difícil racha para el joven piloto, que ha terminado fuera del top 10 en cinco carreras consecutivas.