Al final, el precio de los combustibles ha disminuido menos de lo esperado al inicio de esta segunda semana de septiembre, después de que el Gobierno decidiera descongelar parcialmente el impuesto sobre el carbono aplicado a los combustibles de carretera, con el fin de “reanudar el objetivo de promover la fiscalidad verde y la descarbonización de la energía”.
Contrario a las previsiones que indicaban una caída de 4 céntimos por litro para la gasolina 95 normal, la reducción es solo de 2.5 céntimos. Para el diésel, se esperaba una disminución de 2 céntimos por litro, pero terminó siendo solo de 0.5 céntimos.
Vale la pena recordar que el impuesto sobre el carbono fue suspendido en 2022 en respuesta al fuerte aumento de los precios de los combustibles en ese momento; sin embargo, en las últimas semanas, el Gobierno ha decidido comenzar una actualización gradual del impuesto sobre el carbono, aprovechando la caída de los precios de los combustibles.