En un movimiento audaz, Toyota está lista para electrificar el Campeonato de Supercars de Repco con un Supra con motor V-8 a partir de 2026. Mientras que el Supra de carretera viene equipado con motores de cuatro y seis cilindros gracias a BMW, el mundo de las carreras está a punto de ver una bestia muy diferente. La división australiana de Toyota instalará su V-8 de 5.0 litros, el legendario 2UR-GSE, en el Supra, marcando un nuevo capítulo para el icónico coche deportivo.
El motor 2UR-GSE, una planta de potencia de aluminio naturalmente aspirada, no es desconocido para los aficionados al rendimiento. Ha impulsado todo, desde los modelos de rendimiento F de Lexus como el RC F y el LC 500 hasta el Hilux ganador del Dakar. Ahora, está a punto de llevar a Toyota al ámbito de los Supercars, donde competirá cara a cara con el Mustang V-8 Coyote de 5.4 litros de Ford y un reemplazo aún no anunciado para el Camaro de Chevrolet, que contaba con un V-8 de 5.7 litros antes de la discontinuación del modelo en 2023.
La entrada de Toyota en el Campeonato de Supercoches bajo el conjunto de reglas Gen3 verá al menos cuatro coches de carrera GR Supra en la pista. Dos de ellos serán conducidos por los profesionales experimentados Chaz Mostert y Ryan Wood para el equipo Walkinshaw Andretti United (WAU). Notablemente, WAU está haciendo la transición de Ford Mustangs a Toyota Supras para la temporada 2026, consolidando la creciente influencia de Toyota en el mundo del automovilismo. El otro equipo para la campaña de Toyota aún no ha sido revelado.
La presencia de Toyota marcará la primera vez en siete años que el Campeonato de Supercars contará con tres fabricantes, con Ford, Chevrolet y ahora Toyota compitiendo por la supremacía. En la historia reciente, marcas como Volvo, Nissan y Mercedes habían participado brevemente, pero todas finalmente se retiraron de la serie. La llegada de Toyota está destinada a revitalizar la competencia, trayendo nueva energía y una nueva rivalidad a uno de los campeonatos de turismo más importantes del mundo.
Toyota se ha comprometido a una estancia mínima de cinco años en el Campeonato de Supercars, posicionándose como una fuerza importante en la serie. Con el poder y prestigio añadidos del V-8 Supra, 2026 se perfila como un año clave, no solo para Toyota, sino para toda la parrilla de Supercars. Este anuncio señala la seria intención de Toyota de hacer olas en el mundo de las carreras, junto con sus continuas asociaciones, como la colaboración entre Walkinshaw Automotive Group y Toyota en conversiones de conducción a la derecha para camiones Tundra.
Para los aficionados a las carreras y los entusiastas de Toyota, la introducción de un Supra con motor V-8 en la serie de automovilismo premier de Australia promete ser un espectáculo que no se debe perder.