No es un secreto que el mandato de Darvin Ham con los Los Angeles Lakers no estuvo exento de fricciones, y después de la victoria de los Grizzlies por 122-99 sobre los Bucks, Scotty Pippen Jr. avivó esos rumores. Pippen, quien tuvo una destacada noche defensiva contra Damian Lillard, limitó al guardia All-Star a apenas cuatro puntos con un 1 de 12 en tiros. Pero el verdadero enfoque llegó después del juego cuando Pippen dio una sutil vuelta de victoria, insinuando a un “exentrenador” que dudó de él, un mensaje claramente dirigido a Ham.
Ham se unió a los Lakers en 2022, pero se encontró fuera después de dos temporadas a pesar de llevar al equipo a las Finales de la Conferencia Oeste en su primer año. Se dice que la reputación de Ham por aferrarse a sus propias estrategias, a menudo para frustración de sus jugadores, contribuyó a su despido. Los informes sugieren que un empuje detrás de escena por un cambio ganó tracción a medida que jugadores como D’Angelo Russell y Cam Reddish expresaron críticas en el día de los medios de los Lakers. Incluso Bronny James intervino, señalando aún más el descontento entre la plantilla.
Los comentarios de Pippen son una fuerte indicación de la ruptura duradera, dado su tiempo limitado bajo Ham. Apareciendo en solo seis juegos durante la temporada 2022-23 antes de ser enviado a la G League, Pippen ahora parece haber encontrado su ritmo con Memphis, añadiendo un poco de satisfacción extra al cerrar el juego contra el actual equipo de Bucks de Ham.
Si bien Pippen no nombró a Ham, sus comentarios después del juego dejaron pocas dudas sobre a quién se refería, sugiriendo a un entrenador que “no tenía fe en él”. Para Pippen, la actuación del jueves no solo mostró su crecimiento, sino que también sirvió como una forma de retribución silenciosa. Es difícil no imaginar la satisfacción que debió sentir al demostrar su valía en un gran escenario contra el entrenador que una vez dudó de él.