Los Sacramento Kings han tenido un comienzo mixto en la temporada 2024-25, registrando un récord de 2-2 en sus primeros cuatro juegos. El equipo del entrenador en jefe Mike Brown claramente aún está encontrando su ritmo, pero ya hay un punto brillante: la fluidez en la anotación del recién adquirido DeMar DeRozan. El veterano escolta está demostrando rápidamente que puede ser una fuerza para Sacramento, acumulando cuatro juegos consecutivos con más de 20 puntos para iniciar su carrera con los Kings.
La racha anotadora de DeRozan ya lo ha colocado en una compañía elite. Solo las leyendas de los Kings, Oscar Robertson y Chris Webber, han registrado rachas más largas de 20 puntos para comenzar su tiempo con la franquicia, con Robertson anotando seis juegos en 1960 y Webber siete en 1999. Las contribuciones consistentes de DeRozan han sido vitales mientras los Kings trabajan para integrarlo en su sistema ofensivo, que sigue siendo un trabajo en progreso.
A través de estos cuatro juegos, DeRozan ha promediado 23 puntos, cuatro rebotes, cuatro asistencias y dos robos, mientras lanza un impresionante 55% desde el campo. Como era de esperar, su tiro de tres puntos ha quedado rezagado, con un 2 de 7 desde la distancia para un porcentaje del 28.6%. Pero los aficionados de los Kings—y la gerencia—sabían lo que estaban obteniendo en DeRozan: un maestro del tiro de media distancia que ha destacado durante mucho tiempo en crear su propio tiro en momentos de alta presión.
El principal desafío de los Kings será equilibrar el juego de media distancia de DeRozan con la necesidad del equipo de tener espacio en la línea de tres puntos. Con la historia de DeRozan como un jugador que penetra y amenaza desde media distancia, los Kings necesitarán mantenerlo rodeado de jugadores que abran el campo para despejar el camino. Además, en esta etapa de su carrera, será importante monitorear sus contribuciones en el lado defensivo mientras los Kings buscan mantenerse competitivos en una cargada Conferencia Oeste.
Hasta ahora, la etapa de DeRozan en Sacramento ha sido un comienzo prometedor. Aunque su adaptación al sistema de Brown evolucionará con el tiempo, su rendimiento inicial ha dejado a los aficionados de los Kings esperanzados de que la apuesta del equipo por la exestrella de los Chicago Bulls podría dar frutos.