Publicado: 29 de octubre de 2024
En una tensa transición tras el asesinato de su líder de larga data, Hassan Nasrallah, Hezbollah ha nombrado a Naim Qassem como su nuevo jefe—una figura experimentada ahora empujada a uno de los roles más peligrosos del Medio Oriente. Después de la muerte de Nasrallah en un ataque aéreo israelí dirigido el mes pasado, el rápido nombramiento de Qassem señala la determinación de Hezbollah de mantener su posición en medio de una implacable campaña militar israelí. Sin embargo, con los recientes éxitos de Israel en diezmando el liderazgo de alto nivel en grupos militantes, el tiempo de Qassem en el poder puede enfrentar una amenaza inmediata y constante.
Qassem, Una Cara Familiar con un Objetivo en su Espalda
A sus 71 años, Qassem ha estado profundamente involucrado en la estructura de liderazgo de Hezbollah durante más de tres décadas, sirviendo como el diputado de confianza de Nasrallah y un estratega clave para las operaciones de Hezbollah en Líbano y Siria. Pero su ascenso a la posición más alta de la organización lo ha puesto directamente en la mira de Israel. Enfrentando amenazas de asesinato en cada esquina, Qassem se ha trasladado a Teherán bajo protección iraní, según fuentes de Erem News con sede en los EAU. Las autoridades iraníes facilitaron su mudanza como una precaución, temiendo que pudiera enfrentar el mismo destino que su predecesor si permanecía en Líbano.
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), que ya han atacado las redes de mando de Hezbollah en Líbano y Gaza con ataques de precisión, han señalado su intención de seguir apuntando a figuras de alto nivel que “representan una amenaza directa para la seguridad israelí.” Un portavoz de las FDI insinuó que los ataques, parte de una operación denominada “Días de Arrepentimiento,” no se detendrán hasta que se eliminen los altos mandos de Hezbollah. La proximidad de Qassem a Teherán puede ofrecerle seguridad temporal, pero los expertos advierten que puede ser solo cuestión de tiempo antes de que la inteligencia israelí lo localice.
Un Discurso Desafiante en Medio de un Hezbollah Fracturado
En un discurso televisado tras la muerte de Nasrallah, Qassem buscó tranquilizar a los seguidores y la estructura de mando de Hezbollah, declarando que “el liderazgo del partido y la resistencia están meticulosamente organizados.” Además, enfatizó que los combatientes de Hezbollah están preparados y equipados para “defender Líbano el tiempo que sea necesario.” A pesar de una organización fracturada, su mensaje fue claro: Hezbollah no retrocederá. “Estamos disparando cientos de cohetes y docenas de drones. Nuestras capacidades son buenas, y nuestros combatientes están desplegados a lo largo de las líneas del frente,” dijo Qassem, una señal inconfundible para Israel y los aliados regionales de Hezbollah.
Esta severa advertencia siguió a semanas de creciente violencia entre Hezbollah y las fuerzas israelíes, con numerosos ataques a lo largo de la frontera libanesa. Israel ha derribado a varios de los comandantes de Hezbollah en ataques recientes, una serie de pérdidas que Qassem describió como “golpes dolorosos.” Sin embargo, prometió que Hezbollah continuaría su campaña y adaptaría sus estrategias, aludiendo a la capacidad del grupo para retaliar en toda la región.
¿Cuánto tiempo puede durar?
Aunque el ascenso de Qassem ha consolidado el liderazgo de Hezbollah en un momento de crisis, su supervivencia sigue siendo incierta. Las fuerzas israelíes han mostrado una creciente disposición a atacar a los líderes de organizaciones enemigas, con ataques que incluso se extienden más allá de las fronteras de Líbano. A principios de este año, el líder de Hamas, Yahya Sinwar, quien ideó los ataques del 7 de octubre que resultaron en la trágica muerte de más de 1,200 civiles, fue asesinado en una incursión israelí en Gaza, lo que subraya el compromiso de Israel de eliminar las amenazas percibidas.
La declaración de Hezbollah que anunció formalmente el nombramiento de Qassem invocó la resiliencia del grupo, pero los analistas regionales cuestionan si Qassem podrá soportar la presión creciente de Israel y sus aliados. «Este es un nombramiento simbólico, pero el tiempo de Qassem puede ser efímero», señaló un analista. Hezbollah en sí ha enfatizado su compromiso con su causa, declarando: «El Shura de Hezbollah acordó elegir a Su Eminencia Sheikh Naim Qassem…pidiendo a Dios Todopoderoso».
En este juego de ajedrez de alto riesgo, una pregunta permanece: ¿Puede Naim Qassem, el nuevo líder de Hezbollah, sobrevivir a las oleadas de ataques dirigidos, o también caerá a medida que Israel aprieta su control sobre el liderazgo militante?