China ha armado su bombardero H-6K con el misil hipersónico YJ-21, marcando una actualización tecnológica significativa. El H-6K, una variante modernizada del Tu-16 de la era soviética, ahora es capaz de transportar una variedad de municiones avanzadas, incluyendo el misil antibuque supersónico YJ-12 y el misil de ataque terrestre KD-20. Sin embargo, la adición del misil hipersónico YJ-21 lanzado desde el aire, que supuestamente puede alcanzar Mach 6, coloca a la Fuerza Aérea del Ejército Popular de Liberación de China (PLAAF) por delante en la carrera de armas hipersónicas.
El misil YJ-21 ha sido vinculado anteriormente a aplicaciones de lanzamiento desde buques de superficie, específicamente disparado desde el destructor Tipo 055, pero su variante lanzada desde el aire parece ser un desarrollo reciente. Este misil podría extender la capacidad de ataque a distancia del bombardero, permitiéndole atacar objetivos desde una distancia segura, especialmente durante misiones de «cerco» alrededor de Taiwán, que se han convertido en una parte regular de las operaciones militares de China.
Esta capacidad podría mejorar la estrategia de negación de acceso/área (A2/AD) de China, complicando las respuestas navales de EE. UU. y aliados en la región. El Pentágono ha señalado el creciente número de bombarderos de China y su integración de armas avanzadas, posicionando al H-6K como una parte crítica de las fuerzas armadas de China, que se están modernizando rápidamente.